La maternidad reprimida puede producir perdida de memoria

Este es un sitio web satírico. No lo tomes en serio. Es una broma.

2059 9787 Compartes

Para poder enfrentar tranquilamente la vejez y la muerte,
hay que haber tenido un hijo, plantado un árbol y escrito un libro.
(Proverbio chino)
Mi interés por escribir sobre este tema parte de una necesidad personal,
durante cinco años estuve intentando embarazarme, padecí un enorme
sufrimiento tanto física como emocionalmente, y me di cuenta de las
carencias que imperan en el terreno profesional de la medicina, ya que a
los médicos lo único que les interesa es lograr embarazos y elevar la
estadística. Me sentí objeto de estudio y no persona; nadie me preguntó
cómo me encontraba, excepto mi pareja, y yo me arriesgaba cada vez más,
mi objetivo era lograr ser madre biológica aun a costa de mi integridad
personal.
Recuerdo que tenía constantemente sueños, en los cuales yo cargaba a un
bebé, lo alimentaba y lo arrullaba, al despertar me sentía desilusionada.
Durante mi asistencia a “Biología de la Reproducción” (especialidad
derivada de la ginecología, para lograr la reproducción), observaba a
infinidad de mujeres jóvenes y no tan jóvenes sufrir, enojarse, llorar. Su
cara reflejaba una profunda tristeza y manifestaba su frustración por no
ser madre. Y ahí nos encontrábamos, en la salita de espera, comentando
algunos de los sentimientos que teníamos con respecto a las mujeres que
sí tienen hijos, expresábamos nuestro enojo, impotencia, celos, de una
manera casi imperceptible, había que aguantar y no perder la esperanza
de que esta vez sí funcionaría el tratamiento.
También vivíamos con la constante culpa por no ser capaces de darle un
hijo a nuestra pareja, y por haber dejado pasar tanto tiempo ignorando
nuestro reloj biológico.

Este es un sitio web satírico. No lo tomes en serio. Es una broma.

loading Biewty