Ikea no venderá sus muebles a estudiantes de la LOGSE
Este es un sitio web satírico. No lo tomes en serio. Es una broma.
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Más de 300 consultas son las que desde el departamento de atención al cliente de Ikea atienden diariamente con cuestiones del tipo: "El papel de las instrucciones ¿tengo que recortarlo antes de montar el mueble o después?", "¿por qué mi estantería es blanca si expuestas había también de color madera?", "El corcho largo blanco que viene entre las tablas ¿donde se pone?", "la llave que viene en la caja y que ustedes llaman en forma de "L" a mi me venía con forma parecida a un "7" si la voleteo tiene forma de "J" y si la giro nuevamente si consigo una "L" como ustedes dicen, ¿cuál de las tres uso?"
Del mismo modo, se repite de forma constante la necesidad de aclarar en las llamadas a ese departamento, que las flechas de dirección que vienen reflejadas en las instrucciones no tienen que reproducirlas con un rotulador en los muebles ni tampoco numerarlas como vienen indicadas en el mismo documento.
Un caso sonado en el departamento fue la llamada de una mujer que manifestaba su enojo al haber comprado un armario y tras montarlo, descubrir que no venía dentro del mismo ningún hombre como aparecía en el anuncio de televisión de Ikea.
Caso a parte son ya los montajes de sillones, donde aseguran que algunos clientes les llaman desde el interior del mismo solicitando les saquen de ahí.
El último caso ha hecho que Ikea se replantee su enfoque comercial, donde los propios protagonistas nos contaron lo sucedido:
El caso es que aquello no terminaba de convencernos asique llamamos a atención al cliente. Les contamos el problema y nos pidieron le enviasemos una fotografía. La operadora dijo "ya la he recibido" y acto seguido escuché "pero por el amor de Dios!!" y entonces fue cuando pensé algo no hemos hecho bien. Parece ser que teníamos que haber montado la mesa con las cosas que venían dentro de lo que ahora sabemos es la caja que lo envolvía. Lo cierto es, que nuestro compañero Jorge, mientras la montabamos, dijo "esta gente con tal que aparente es buena le meten madera para que pese más". Pero no reparamos en ese detalle, quien se iba a imaginar que lo estabamos haciendo mal. Al final todo quedó bien, Ikea nos envió gratuitamente cinta de carrocero para que remataramos las esquinas.
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